Hace un mes tuve la oportunidad de dar dos conferencias en Campus Party.
Mis nervios estaban al máximo. La última vez que estuve parado frente a tanta gente fue cuando di el discurso de graduación de la Universidad. Han pasado casi tres años de eso.
Pero no me desvío del asunto. El tema que elegí para presentar en Campus obviamente debía girar en torno a la tecnología y poderse abordar desde mi profesión. Entonces fue bastante evidente que debía hablar de Bitcoin.
Por si no lo saben, Bitcoin en un protocolo que permite hacer transacciones y una de sus aplicaciones es usarse como moneda. Entonces, tiene un lado tecnológico, pero también uno económico. El segundo es uno del que poco se habla y muchos no entienden, por eso me pareció importante abordarlo.
Pero sigo con mi aventura.
La primera plática era en martes a las 10 de la noche, un día antes de la inauguración oficial, por lo que el horario no era muy favorable. Llegó la hora de empezar y el auditorio se encontraba, no mentiré, casi vacío. Pero poco a poco se fue llenando y al terminar estaba a tres cuartos de su capacidad.
Al finalizar la plática se me acercaron personas a entrevistarme y hacerme más preguntas que no alcancé a contestar por tiempo. Además, algunos de ellos eran parte de la comunidad Bitcoin en México, quienes me invitaron a una plática sobre el tema algunos días después para resolver dudas de la audiencia sobre el lado económico de Bitcoin.
La segunda conferencia era el sábado a las 7 de la noche, un horario mucho más amable y con posibilidades de mayor audiencia. ¿El problema? Que no la tenía preparada. Sabía lo que iba a decir y los temas que quería abordar, pero la presentación, lo que se iba a proyectar no estaba ni cerca de estar listo.
Además, con las asistencia a conferencias, realización de entrevistas y cobertura para el trabajo, tuve que sacrificar sagradas horas de sueño para que quedara. Y así fue.
El sábado llegó y tenía lista la presentación que narraba la historia del tipo de cambio de bitcoins desde su nacimiento hasta ese día. Lo interesante de contar la historia con el valor de su cotización es que, como toda moneda, las variaciones responden a sucesos en el mercado que, en el caso de Bitcoin, son la historia de su aceptación.
Una vez más estaba nervioso. En el video quizá no lo noten, pero en un momento estaba tan nervioso que casi tiro la botella de agua sobre la computadora. Muy nervioso.
A final de cuentas todo salió bien; las sillas no alcanzaron para los que se interesaron en escuchar la plática, hubo muchas preguntas y nuevamente se me acercaron personas después para hablar un poco más.
@gomezlovera de @dinero_exc “BITCOIN a través de los medios” #CPMX5 en escenario #Guternberg pic.twitter.com/yIXqoHppHB
— Sergio Andrés (@cheko5) June 29, 2014
Fue una experiencia muy enriquecedora que me obligó a salir de mi zona de confort. Contrario a escribir, hablar frente a muchas personas es algo que me pone muy nervioso, pero logré tomar el control de la situación y ejecutar mi plan. Dar una conferencia al mismo tiempo que contaba la historia de un tema que me apasiona.
Estoy seguro que serán las primeras de muchas.